Berlín.- “Las fricciones entre Estados Unidos y Rusia a causa de la crisis de Ucrania no van a provocar el fin de la Estación Espacial Internacional (ISS)” indicó el administrador de la Nasa, Charles Bolden, descartando que una de las empresas científicas más prestigiosas del mundo pueda ser víctima de desacuerdos políticos.
Bolden salió así al paso de las afirmaciones de responsables de Roscosmos, quienes anunciaron que podría cesar su cooperación con EE UU en el proyecto a partir del 2020. Aunque Japón, Europa y Canadá son también miembros, todos dependen de las cápsulas rusas Soyuz para transportar astronautas a la estación, desde que la Nasa retiró su flota de transbordadores.
"No hay ningún aliado que pueda terminar por sí solo los trabajos en la ISS", dijo Bolden a la prensa en Berlín, donde asiste a la ILA, que se desarrolla estos días en la capital alemana.
Bolden añadió que la cooperación entre la Nasa y la agencia espacial rusa Roscosmos en la estación no ha cambiado absolutamente en los últimos años. El proyecto ha soportado la atmósfera crecientemente fría entre ambos países. Pero incluso así, Bolden indicó que si por una u otra razón un país abandona el proyecto, los otros lo continuarían.
"No hay aliados indispensables en la ISS", dijo. La Nasa espera que compañías privadas como SpaceX puedan desarrollar cohetes y cápsulas para llevar astronautas a la estación para 2017.
A la pregunta de si hay posibilidades de integrar a China en el proyecto, habida cuenta de que actualmente la Nasa no puede cooperar con ese país en vuelos espaciales tripulados, Bolden dijo: "No hay nada que indique que nuestra relación vaya a cambiar".