Bruselas.- “Las normas sobre colegiación obligatoria deben estar diseñadas de manera que la libre circulación de servicios y la libertad de establecimiento no se vean afectadas”, concluye en su reciente dictamen el Comité Económico y Social Europeo, órgano auxiliar de la UE, sobre “El papel y el futuro de las profesiones liberales en la sociedad civil europea de 2020”.
Según dicho dictamen, “los instrumentos adecuados son el reconocimiento de los registros de otro Estado miembro o las inscripciones gratuitas, si existe una organización en otro Estado miembro de la Unión Europea”.
“Un requisito funcional para la autonomía administrativa es la colegiación obligatoria en aquellos países en los que sea posible con arreglo a la legislación en vigor. Esta intromisión en la libertad de la práctica profesional se justifica por un interés público superior”, concluye el dictamen.
El documento, del que ha sido ponente Arno Metzler, fue aprobado en sesión plenaria del Comité el pasado 25 de marzo por 210 votos a favor, 8 en contra y 11 abstenciones.
“El sistema de las profesiones liberales, con ciertos ajustes sociales, contribuye sustancialmente a garantizar que en el futuro se ejerzan con calidad unas funciones que se corresponden con el concepto de «bienes sociales» como la salud, la seguridad general de la población, la protección de los derechos de los ciudadanos y también la prosperidad económica. Las profesiones liberales son parte integrante de toda sociedad democrática y presentan un considerable potencial de crecimiento en materia de empleo y PIB”, asegura entre sus conclusiones el dictamen de la UE.
El documento recomienda también que, "como complemento de las organizaciones nacionales interprofesionales y de la representación europea interprofesional, debería establecerse, para cada profesión liberal, una organización profesional en todos los Estados miembros que elabore, publique y desarrolle principios de deontología profesional, en los países en que esta tarea no haya sido efectuada ya por los colegios profesionales. Dicha organización también debería velar por el cumplimiento de esos principios éticos por parte de los profesionales".
El dictamen recuerda, además, que "en la prestación de servicios de profesiones liberales, algunos bienes jurídicos protegidos muy personales suelen estar expuestos a un peligro particular". Por ello, es necesario "regular la profesión y establecer requisitos muy exigentes para poder ejercerla, lo que afecta no solo a la formación y a otras características personales, como, por ejemplo, una buena reputación o el control de la salud, sino también a la renuncia al ejercicio de actividades incompatibles".