Washington.- La órbita de la Estación Espacial Internacional (ISS) tuvo que ser elevada la pasada semana cerca de 0,8 kilómetros para evitar una posible colisión con un fragmento de un viejo cohete europeo Ariane 5, según informó la Nasa.
"Los controladores de vuelo rusos y de la Nasa rastrearon el adaptador Sylda en los últimos días antes de decidir de manera conjunta realizar la maniobra", dijo la agencia espacial en un comunicado. Si no se hubieran tomado medidas, los restos del lanzador habrían pasado muy cerca de la ISS.
La media docena de astronautas que integran la tripulación actual recibió informes sobre la maniobra, pero nunca estuvieron en peligro, dijo la Nasa.
Esta es la segunda ocasión en menos de tres semanas en que la ISS tiene que esquivar basura espacial. El 16 de marzo, los controladores de vuelo realizaron otra maniobra para lograr que la ISS evadiera un fragmento del satélite ruso Meteor 2-5 lanzado a finales de octubre de 1979.