Washington.- Los cosmonautas rusos Serguei Riazanski y Oleg Kotov, que salieron el pasado sábado de la Estación Espacial Internacional (ISS) para instalar cámaras de alta resolución en el exterior de la misma, a unos 400 kilómetros de la Tierra, no lograron dar con la calidad de imagen requerida, por lo que tuvieron que desmontarlas e introducirlas de nuevo en la ISS.
El centro de control de vuelo, situado en las afueras de Moscú, informó que problemas técnicos impidieron el montaje de varias cámaras en el exterior de la ISS, tras una operación en el espacio abierto de dos astronautas durante ocho horas y siete minutos.
No obstante, se realizó con éxito la instalación de varias cajas con experimentos y una zona de trabajo en el exterior de la estación. Con ocho horas y siete minutos es hasta ahora la salida al exterior más larga que se ha realizado con los trajes espaciales rusos "Orlan-MK", que cuentan con un sistema informatizado.
Ha sido ésta del pasado sábado la tercera salida de la ISS en una semana. Los últimos en salir habían sido los estadounidenses Michael Hopkins y Rick Mastracchio, que sustituyeron una bomba defectuosa en el día de Nochebuena. Pese a la reparación, las autoridades señalaron desde Moscú que el sistema de refirgeración exterior de la ISS no funciona del todo bien.