Londres.- Airbus se apresta a revisar la estrategia para su avión de gran tamaño A380 debido a una disminución de las órdenes y no ha descartado recortar la producción de la aeronave más grande de mundo mientras espera que el panorama económico mundial mejore, según informa la agencia Reuters.
Pese a su agresiva campaña de marketing, las ventas del avión de 525 asientos y dos pisos están ralentizadas en unos momentos en los que muchas aerolíneas se están orientando hacia modelos menores, más estrechos y con dos motores, como el A350, también de Airbus.
Su rival estadounidense, Boeing, dijo la semana pasada que reduciría la producción de la última versión de su avión de gran tamaño B 747, mientras está dispuesto a decidir sobre lanzar o no una versión de 406 asientos de su avión B 777.
Airbus no ha recibido un pedido concreto del A380 este año y, en cambio, ha registrado tres cancelaciones. Ha vendido un total de 259 unidades.
Su director comercial confía en que Airbus firmará una serie de acuerdos en los próximos dos meses para no terminar el año con más cancelaciones que pedidos, un serio contratiempo para un avión que fue elogiado como una maravilla europea cuando fue presentado hace ocho años. Pero en sus fábricas, Airbus se está acercando a un punto crítico, a pesar de la elevada popularidad del avión entre los pasajeros tras seis años en el mercado.
La preocupación inmediata recae en que la interrupción en la línea de producción para el 2015 fuercen a Airbus a construir aviones que no ha podido vender aún -conocidas como "colas blancas"-, afectando los desembolsos por aviones valorados en 400 millones de dólares la unidad a precio de catálogo, la mayoría de los cuales son pagados al momento de la entrega.
El tiempo para evitar el problema se está agotando debido a que algunas partes de la aeronave, como metales fundidos, tienen que ser ordenadas hasta con dos años de anticipación.
En medio de estas preocupaciones, es probable que Airbus tenga la oportunidad para "revisar la situación y la estrategia" en torno al A380 hacia fines del año, dijo una fuente de la industria que pidió no ser nombrada.
Entre las alternativas se incluye recortar la producción bajo la meta de 30 aviones por año, tomar una postura menos proactiva sobre la aeronave y concentrarse mayormente en fabricar lo que ya ha sido vendido.