Madrid.- Un Boeing 747 de la compañ;ía Pullmantur Air quedó atrapado durante cuatro horas entre dos farolas en el aeropuerto madrileñ;o de Barajas el pasado lunes, según consta en la fotografía de Castela publicada ayer en el diario vasco “El Correo”.
Al parecer, el problema se produjo cuando los operarios trasladaban la aeronave. Al hacer uno de los giros, los empleados calcularon mal la maniobra a realizar y abrieron demasiado la trayectoria, invadiendo la zona cercana a donde se realizan las operaciones de tierra.
El problema se agravó al intenta rectificar, puesto que al dar marcha atrás, el avión no giró de la misma forma que el sentido de la marcha. El incidente ocurrió a las 10 de la mañ;ana y a base de pequeñ;as maniobras de avance y retroceso, lograron sacar al avión cuatro horas más tarde.