Tokio.- La compañ;ía aérea japonesa All Nippon Airways (ANA) reanudó ayer las operaciones comerciales de su flota de B 787, “Dreamliner”, una semanas antes de lo previsto.
El avión fue utilizado en los vuelos internos entre Sapporo, en el sur de la isla de Hokkaido, al norte del país, y el aeropuerto de Tokio-Haneda,como había anunciado días antes la compañ;ía en un comunicado. “Se han realizado modificaciones en todos nuestros 787 y hemos llevado a cabo pruebas adicionales”, dijo el presidente de ANA, Osamu Shinobe.
El producto más moderno del constructor aeronáutico estadounidense Boeing ha permanecido en tierra durante tres meses y medio, tras detectar el pasado mes de enero el sobrecalentamiento de las baterías de litio en uno de sus aviones durante un vuelo de ANA en Japón y otro en un avión de otra de las compañ;ías aéreas niponas, Japan Airlines (JAL), estacionado en el aeropuerto de Boston.
ANA, que cuenta con 18 Boeing 787 -un tercio de la flota mundial entregada por el fabricante estadounidense-, se ha visto particularmente afectada por la prohibición y tenía prisa para reanudar los vuelos comerciales de este aparato, tanto los vuelos internos como internacionales.
La semana pasada, la compañ;ía anunció que había surgido un pequeñ;o incidente en un vuelo de prueba realizado en Japón: un panel eléctrico ennegrecido debido, probablemente, al recalentamiento provocado por las vibraciones originadas por un perno mal ajustado. Pero ha asegurado que este incidente puntual no amenaza la seguridad del aparato.
La explotación comercial del “Dreamliner” se reanudó el pasado lunes en Estados Unidos, por primera vez tras los incidentes de enero, con un vuelo de la compañ;ía United Airlines entre Houston y Chicago.
