Castellón.- Carlos Fabra, el creador del aeropuerto vacío de Castellón, no ha logrado ver coronada su obra con la puesta en marcha de las operaciones aéreas como presidente de Aerocas, su empresa promotora, y dimite justo dos años después de la inuguración del aeropuerto. El pasado viernes renunció a su cargo tras la apertura del juicio oral por supuestos delitos de tráfico de influencias, cohecho y fraude fiscal.
Le sustituye al frente de la empresa promotora del aeropuerto José Ciscar Bolufer, vicepresidente del Consejo de la Generalitat valenciana y consejero de Presidencia y Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua. Ciscar preside también la comisión interdepartamental del Gobierno valenciano donde se analizan las posibles ofertas de compra por el aeropuerto de Castellón.
El Juzgado de Instrucción número 15 de Nules decretó el pasado viernes, en una resolución contra la que no cabe recurso, la apertura de juicio oral contra el que fuera presidente de la Diputación castellonense y líder provincial del PP.
El auto mantiene la fianza de 4,2 millones de euros que se le impuso e insta a la Audiencia de Castellón a fijar la fecha de la vista oral, ya que es este órgano el competente para juzgarle.
Al conocer dicha resolución judicial, Carlos Fabra presentó su remisión irrevocable al presidente de la Generalitat valenciana.