Madrid – El año 2012 fue muy importante para SESAR, el sistema europeo para la gestión del tráfico aéreo. Un proyecto clave del transporte aéreo europeo que contribuirá a la dinamización económica de Europa y a su cohesión.
El proyecto SESAR está preparando el terreno para que los saturados cielos del Viejo continente tengan un futuro sostenible, de su éxito para aumentar la eficiencia del tránsito aéreo en Europa y su racionalización vendrá la posibilidad de reducir las emisiones de carbono y la congestión. En este sentido, en 2012 se alcanzaron objetivos muy significativos y Thales, el socio industrial más destacado del proyecto, estuvo en el centro de todos ellos.
En la actualidad, Thales es la empresa privada más destacada en este proyecto. Con el 40% de cuota de inversión industrial básica y 250 expertos dedicados específicamente a SESAR, la aportación de Thales es prácticamente el doble que la del segundo proveedor industrial del proyecto. Siendo la única compañía que abarca todos los segmentos del proyecto (tierra, aire y espacio), Thales claramente ha apostado sus fuerzas y su credibilidad global a favor del éxito de SESAR, un proyecto que llegará a buen puerto gracias especialmente a los esfuerzos del grupo.
El año empezó bien con el éxito en el vuelo de prueba I4D realizado en febrero entre Toulouse y Estocolmo. El ensayo, que tenía como objetivo la coordinación del intercambio de datos entre diferentes centros de control y un avión de pruebas, todos los cuales contaban con equipos de Thales, predijeron con precisión la trayectoria del avión, el vector y la hora de llegada con un margen de error de solo unos segundos. La prueba continuó con otros estrictos ensayos de simulación en los que se utilizaron al completo los sistemas TopSky-ATC y la plataforma IBP TopSky-Simulation de Thales. Este éxito prepara el terreno para la implementación de procesos que pueden traer consigo una mejora importante de la secuencia de llegada a los aeropuertos y reducir los retrasos y el consumo de combustible, especialmente cuando la densidad del tráfico es elevada.
En tierra, el proveedor de servicios de navegación aérea de Francia, DSNA, utilizando la torre de control IBP TopSky llevó a cabo con éxito varias simulaciones en tiempo real de las nuevas funciones de secuenciación de las salidas, rodaje digital y elección de rutas en el aeropuerto Charles de Gaulle de Paris. La navegación aérea es uno de los asuntos más problemáticos para los pilotos, los aviones queman ni más ni menos que 8 kilos de combustible por minuto cuando navegan en aeropuertos y los pilotos, que en aire tienen acceso a sofisticadas herramientas de navegación, suelen acabar utilizando mapas de papel de los aeropuertos cuando están en tierra. Thales es de los primeros que ha realizado ensayos en un entorno real para desarrollar una solución probada.
DSNA y Thales también han realizado ensayos con el sistema de gestión de la información SWIM y la infraestructura europea de redes de gestión del tráfico aéreo (Servicios de Red Paneuropeos o PENS). Los componentes de SWIM permiten una integración más rápida y sencilla de los diferentes sistemas de gestión del tráfico aéreo. Esto es el primer paso hacia la compartición de Objetos Voladores entre proveedores de servicios de navegación aérea, y prepara el camino hacia la Interoperabilidad (IOP) en Europa. El siguiente objetivo está programado para junio de 2013: un ejercicio de validación tripartito para demostrar las ventajas operativas para todos los agentes.
Estos días Madrid acoge el Congreso Mundial sobre Gestión del Tráfico Aéreo de 2013, allí Luc Mestrallet, director de Ventas para Europa de Thales, afirmó “Europa es nuestro hogar. Aquí están nuestras raíces, y hemos aprendido lo que significa ser un líder en la gestión del tráfico aéreo en estos cielos. Cada día, 80.000 aviones surcan Europa, una cifra que es casi el doble que la de 1990. Esto es insostenible a todas luces y, como líder indiscutible en gestión del tráfico aéreo en Europa, Thales cree que es su obligación aportar sus recursos, conocimientos e ingenio para ayudar a garantizar el futuro del cielo que nos enseñó a ser los líderes en este campo”.